Otro horno más.

Ayer abrí otro horno de alta temperatura, y tenía bastante interés por éste pues había dentro un par de estatuillas que están modeladas, vaciadas y cosidasy no sabia cómo iban a responder a la vitrificación (el gres es una pasta vitrificada, es decir, ha perdido su porosidad para hacerse un material compacto). El resultado ha sido bueno en la figura de Cthulhu y malo en la de Nyarlathotep como se verá ahora en las fotos. Por cierto quien quiera saber más de estas frikadas que se lea el libro Los Mitos de Cthulhu o cualquier relato de Lovecraft. Más adelante me gustaría hacer también alguna escultura que tenga que ver con el relato de El Cuervo o de Hop-Frog, de Poe. A este último le tengo especial cariño por ser (..........¡¡¡cuidado spoiler!!!......) un enanillo cabroncete  y regicida.

Detalle de la grieta que le ha salido a la aberrante figura de Nyarlathotep, El Faraón Oscuro (¡ups, que miedo!)

Las siguientes fotos son del resto de piezas que salieron del horno:

Esta última pieza es una jarra de cuatro asas que he diseñado, y que me pareció muy curiosa. Después de hacerla investigué por la red si había por ahí algo parecido, y me encontré una leyenda muy chula en la que están involucrados Carlos V, una tabernera de Flandes y una jarra de cuatro asas. Básicamente por lo que he leído va de una tabernera picaruela que se ríe en toda la cara del susodicho emperador (¡zas, en toda la boca!).